Se presentó en la Asociación Médica el libro “Los últimos 50 años de la Medicina Argentina y sus Protagonistas”, del doctor Mauricio Barón de edición reservada de la Editorial Perfil.
El acto tuvo una característica muy especial, a raíz de que tanto Barón como quienes escribieron sus capítulos dedicados a cada especialidad fueron profesionales de aquel Sanatorio Güemes de la excelencia médica, en donde brillara también René Favaloro.
El capítulo inicial es una cálida recordación de los inicios de Barón en la medicina. “En 1936 ingresé en la facultad e hice toda la carrera en el viejo edificio de la avenida Córdoba (donde hoy está Ciencias Económicas) frente al antiguo Hospital de Clínicas”, dice el autor antes de incursionar en las famosas cátedras de entonces. “Cuando me recibí, en 1943 -agrega-, la facultad ya había inaugurado su monumental y hermoso edificio. Funcionaban allí las cátedras de Anatomía Descriptiva, Anatomía Topográfica, Histología y Fisiología.
En esta tuve el honor y el gusto de que me enseñara y me tomara examen nada menos que Bernardo Houssay, nuestro Nobel de Medicina. Tuve grandes maestros como Pedro Belou en Anatomía Topográfica, y el doctor Cirio en Anatomía Descriptiva. De algunos sería imposible olvidarse. Por ejemplo, en Infectología, junto con Carlos Alberto Videla estaba Carlos Fonso Gandolfo, un personaje sumamente pintoresco. Era un tipo muy buen mozo que había quedado paralítico a raíz de un drama pasional y dictaba clase desde el sillón de ruedas”.
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