POR HÉCTOR DE LA FUENTE
Especial para NUEVA RIOJA
" Dice el popular refrán: "tengan cuidado con lo que desean". Y una cosa son algunos anhelos, en el plano ideal y otra muy distinta son en el plano real. So pena que se hagan realidad. Y si los augurios se concretan puede que no sean del todo agradables en la práctica y en el plano de la realidad y pueden ser hasta opuestos al mundo de las ideas. Es tal cual. Por ello se puede decir, sin temor al yerro, que el personaje de esta columna, Claudio Zin, otro miembro del clan de los médicos televisivos casi logra lo que quiso, siempre dentro de sus posibilidades. Uno de estos deseos fue el abrazo de la fama mediática.
Y, lo logra como aspirante a político (en su tercera etapa profesional) algo que como médico no pudo alcanzar. Y fue esto, así, a pesar de haber sido un distinguido e inteligente especialista en el sistema renal (en su primera etapa). Llegó a lo que deseaba pero el tema, ya un dilema para él, es, como salir de un callejón: el de la fama y de las posibles querellas judiciales cuando se es funcionario público a cargo, nada menos, que del ministerio de salud de la provincia de Buenos Aires.
Algo que hizo el médico luego de recalar en este cargo sin ser ni especialista en la materia salud pública ni militante declarado del partido justicialista o un extra-partidario siquiera. Cargos, estos, que como el PAMI o el Ministerio de Salud de la Nación, ya son una suerte de silla eléctrica. En lo personal, este columnista, conoce a muy pocos o a casi nadie que salga bien parado del mundo de la política. Pero es tema de análisis para otra columna.
Conexión La Rioja
Ocupar el ministerio, siguiendo los pasos de su amigo Cormillot, fue de seguro para Zin, casi tocar el cielo con la manos. Tocarlo sería para él ser el ministro nacional. Llegó, luego de una aceptable carrera como columnista televisivo y radial (aquí empezó a ser más conocido aunque erró mucho por opinar en demasía en otras especialidades médicas). Y fue columnista sin base periodística, que no es lo mismo que ser periodista aunque la fantasía de serlo siempre está.
Para algunos, fue un golpe de su audacia y, para otros, más bien la actitud de un kamikaze como cuando fue candidato a diputado-corresponsal para Italia. Así nos enteramos que Zin nació en Italia y que esa paga en euros no es nada mala. Por el contrario.
Se sabía pero ahora ya es pública, la admiración secreta del doctor Zin por la política y por los políticos.
Y como todo se une y se conecta, existe la conexión con La Rioja pues Zin fue asesor en una dependencia como la ANMAT (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología) bajo la órbita del ministerio de Salud Pública del gobierno del ex-Presidente Carlos Menem.
Así es y en efecto está, Claudio Zin como médico nefrólogo y ahora un ex "periodista científico" devenido a político y funcionario público.
Educado es y por lo general buenas maneras tiene, quien siempre soñó con estos "momentos" ondulantes de adrenalina y de vértigo pero peligrosos, aunque fieles a como vivió. Esto es, desde luego, algo más que ir al filo de la navaja.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por comentar en Látidos, periodismo cardiovascular.