POR HECTOR DE LA FUENTE
"Los médicos del corazón, René Favaloro y Luis De la Fuente, quienes se desempeñaban en el Sanatorio Güemes, de la Capital Federal, no pudieron acceder a atender al General Perón en los años ‘73 y ‘74. Esta información -que parece fría-, posee un hondo contenido histórico y resurge con fuerza por las efemérides del mes de julio.
Los especialistas de la medicina cardiovascular, Favaloro (cardiocirujano) y De la Fuente (cardiólogo intervencionista), trabajaron juntos, "codo a codo" en esa legendaria clínica, luego del regreso de ambos al país por espacio del período comprendido entre 1971 y 1992.
El doctor De la Fuente fue quien, en definitiva, convence a Favaloro, de regresar a nuestro país, para poder realizar aquí lo que estaban haciendo ambos, en los Estados Unidos de América.
Volviendo a Perón, tal vez fue que ambos médicos no pudieron atenderlo porque el mismo López Rega lo impidió. López Rega, era, por entonces, el hombre fuerte del entorno presidencial y fue el ministro de Acción Social.
¿Hubo acaso un pedido de interconsulta a dichos médicos, por parte de la familia de Eva Duarte de Perón? ¿Fue dicha gestión a través de Blanca Duarte, la hermana de Eva?
La hermana de la mítica mujer argentina fue atendida, por años, por el doctor De la Fuente, a quien este columnista no consultó por motivos obvios (desde de la ética médica por un lado a la periodística por el otro).
Según lo publicado por el diario Ámbito Financiero en 2008 (y en el 2000 con motivo del suicidio del cardiocirujano), Perón se hubiera salvado con un triple by-pass por aquel año 1974. Un año que fue fatídico para el movimiento peronista y para el país por los avatares posteriores políticos.
En el Sanatorio Güemes, esa operación de by-pass, que empezó a desarrollarse en el país, desde el año 1971, estaba en pleno auge y apogeo y por entonces era de rutina.
La angioplastia coronaria surge -en el año 1977, en Suiza-, a manos de un médico alemán que vivió, casualmente, en Argentina de niño. Por aquel entonces, no era viable esta técnica de dilatación coronaria por cateterismo (mínimamente invasiva).
Antes, en 1964, se efectuo, por primera vez -en el mundo-, una angioplastia en las arterias de las piernas, a manos de Dotter, un radiólogo cardiovascular, con quien tambien trabajo el doctor De la Fuente (Dotter, fue frenado en los EE.UU., por los prominentes cirujanos del "establishment").
En otro orden, el general De Gaulle, solía decir, que no había nacido el cirujano capaz de operarlo a él, y el "genial" Einstein, tampoco accedió a una compleja intervención por un supuesto aneurisma de aorta con el pionero a nivel mundial de dicha técnica, Michael DeBakey.
¿Habrá pensado lo mismo, el "general" argentino, quien fue, además, por tres veces presidente de nuestro país? ¿Y su entorno López "Reguista"?
Perón, finalmente, con la sumatoria de su cardiopatía isquémica, su insuficiencia cardíaca, sus supuestos dos infartos previos, la leve insuficiencia renal y sus trastornos respiratorios con edema de pulmón: fallece el 1 de julio del año 1974. Su muerte generó una conmoción social y un verdadero cambio cualitativo en la política argentina ".
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